Difícil encontrar tartas fáciles de preparar más ricas que esta… Si os gusta la piña, claro… Tarta de piña, ¡sin honor! Ideal para tomar como postre, en la merienda e incluso en el desayuno. Además, es ligera. Es decir, se podría incluir dentro de las tartas light que os vamos a ir enseñando en el blog. Así pues, manos a la obra.
Recetas para hacer tartas frías
Ingredientes:
– Bizcochos, más o menos unos 12 bizcochos de los que venden alargados, conocidos como ‘soletilla’.
– Dos latas de piña en su jugo, de unos 420 gramos cada una.
– Un litro de nata líquida para montar.
– Dos sobres de gelatina de piña, cada uno de unos 85 gramos.
Lo primero es abrir las latas de piña. Escurre el jugo de una de ellas y moja uno a uno los bizcochos. Estos irán en la base de la tarta, en un molde desmontable. Reserva también unas cuantas rodajas de piña para adornar, ¿eh? El resto las vamos a triturar con la batidora, incluyendo la nata. El resto del jugo ponlo en un cazo a hervir y cuando esté ya en su punto agrega la gelatina, mezcla bien y deja que se temple unos cuantos minutos.
Ahora solo queda mezclar las tres preparaciones que hemos hecho: por un lado, la piña triturada; por otro, el jugo con la gelatina y la nata; por último, el molde con los bizcochos en la base. Hay que verter la mezcla sobre la base de bizcochos y guardarla en el frigorífico. Una vez esté ya fría, adórnala con rodajas de piña y con nata si gustas. Sírvela bien fría…
Sencillísima receta de tartas fáciles, ¿Verdad? Difícil superar…